Lo primero que sentí al terminar La Separación, de Silvia Arazi, fue la necesidad de preguntarle a la autora si se había separado recientemente. Tan vívido, tan real, me había resultado el texto.
Creo que para todos los que nos hemos separado alguna vez, este libro es como un amiga que te lleva a ver un show porno para celebrar tu divorcio o, para los hombres, un amigo que te lleva a tomar hasta quedar inconsciente.
Toda separación tiene etapas. La que nos cuenta Arazi empieza con la decisión presuntamente tomada por ambos: "Hemos hablado mucho de nuestra separación. La hemos deseado mucho. También la hemos temido."
Le leí el comienzo a mi ex: "Miro dormir a un hombre que a partir de mañana será mi ex marido para siempre y que, probablemente, ya no vuelva a dormir a mi lado". Él me dijo que le parecía típico de las mujeres fijarse en esas cosas.